Tina (Florentina Fernández-Prendes Álvarez)
Avilés, 1899 – ¿?
Florentina Prendes fue una fotógrafa que combinó diversas facetas profesionales y artísticas. Publicó su trabajo tanto en la prensa regional como en revistas fotográficas de aficionado, fue la autora más premiada en los concursos organizados por la Revista Kodak, participó en exposiciones de arte local y retrató a la población avilesina en su estudio «Foto Tina».
Florentina Fernández-Prendes, Obdulia García en el taller de modelado, h. 1925-1930.
Fernández-Prendes Álvarez, Florentina
Florentina Fernández-Prendes Álvarez nació en Avilés (Asturias) en 1899. Era la hija mayor de Constantino F. Prendes, fundador del establecimiento denominado La Droguería, ubicado en la calle Suárez Inclán, 4 y 6, de dicha localidad, que estaba especializado, además de en perfumería y ortopedia, en fotografía, como evidencian algunos de sus anuncios publicitarios de los años veinte, en los que podía leerse: “Especialidad en artículos para FOTOGRAFÍA / Se hacen trabajos fotográficos”. En relación con su vinculación al medio hay que señalar que Constantino F. Prendes también editó series de tarjetas postales, algunas de las cuales destacaron por ser, en palabras de Francisco Crabiffosse, “absolutamente singulares por su temática en el panorama asturiano”.
De esta manera, aunque no disponemos de más datos sobre su juventud, probablemente Florentina Prendes entraría pronto en contacto con la fotografía en el negocio familiar, con todas las facilidades de acceso a formación técnica y productos fotográficos que ello implicaba. En cualquier caso, desde mediados de los años veinte, encontramos referencias a Florentina Prendes, Tina, como autora en publicaciones de carácter diverso.
Por un lado, desde mediados de los años veinte, Florentina Prendes fue una de las numerosas fotógrafas aficionadas que concurrieron a los múltiples concursos organizados por la Revista Kodak, de carácter bimestral, cuyos resultados no solo evidencian que dicha participación femenina se hizo cada vez más habitual desde principios de la década, sino que también prueban el éxito que tuvieron las propuestas de algunas de estas autoras en dichos certámenes, ya que un importante número de ellas fueron distinguidas con diplomas de mérito, pero también con primeros, segundos, terceros y cuartos premios en numerosas ocasiones. Y, aunque las referencias a muchas de estas aficionadas son esporádicas, algunas destacan por la frecuencia con que sus nombres figuraron entre los galardonados, como es el caso de Florentina Prendes, que fue la autora más premiada, seguida de Blanca Betancourt (de Madrid) y Manuela Jurado (de Huelva). Recibió un total de once distinciones por las siguientes fotografías: Un pasto pobre (Concurso N.º 1, diploma de mérito), Tres fieles amigos (Concurso N.º 3, cuarto premio), Lavando (Concurso N.º 6, tercer premio), Preparándose para la carrera y Nueva ondina (Concurso N.º 10, primer premio y diploma de mérito), Buen ejemplar (Concurso N.º 12, diploma de mérito), Puerta de San Nicolás (Concurso N.º 15, cuarto premio), Retrato (Concurso N.º 18, cuarto premio), En la garita (Concurso N.º 24, cuarto premio), Tres eran tres (Concurso N.º 25, cuarto premio) y Nolo y Colasa (Concurso N.º 28, segundo premio).
Aunque para muchas de estas mujeres la práctica fotográfica pudo comenzar como un pasatiempo, en algunos casos se convirtió en una forma creativa de expresión e incluso en su profesión, como en el caso de Florentina Prendes. La autora colaboró como reportera gráfica en medios regionales como el diario Región, editado en Oviedo, en cuyas páginas encontramos fotografías firmadas por Tina que ilustran, por ejemplo, el Pergamino que el real Club Náutico de Salinas entregó al general Primo de Rivera con motivo de su visita al club en 1924, o documentan la visita del señor Fuentes Pila, gobernador civil de la provincia, a Avilés en 1926, retratándolo tanto en el balcón central del Ayuntamiento durante su discurso de salutación como saliendo de la Escuela de Artes y Oficios acompañado, entre otros, por el alcalde de la localidad. Además, sus fotografías fueron reproducidas también en los sucesivos números de la revista El Bollo, editada anualmente con motivo de las fiestas locales, al menos entre 1925 y 1930.
Además, durante los años veinte, Florentina Prendes fue también participante habitual en las muestras de arte avilesino. En 1926 expuso su obra junto a la de José Espolita en la sección de fotografía de la II Exposición de Arte Avilesino, por la que recibieron el elogio de la crítica en publicaciones locales pero también en publicaciones nacionales como La Esfera, en la que José Francés afirmaba que la autora era una “notable artista fotográfica”. Por su parte, en el diario ovetense Región C. A. Herrero se refería a ellos como “dos notables artistas, cuyas fotografías tienen vida de arte y espíritu exquisito de motivos emocionales poco frecuentes en trabajos de esta índole”, y, entre los trabajos presentados por Florentina Prendes, destacó los titulados Un rincón de Avilés y Tres buenos amigos. En este tipo de fotografías, la autora seguía corrientes modernas de la fotografía artística, interpretando su entorno más próximo desde ópticas nuevas y prestando especial atención al tratamiento de la luz.
Por último, hay que señalar que Tina Prendes tuvo además un estudio fotográfico en Avilés, faceta en la que se centró especialmente desde mediados de los años treinta, ya que, tras el fallecimiento de su padre en 1933 y el estallido de la guerra civil, tuvo que profesionalizarse y dejar a un lado la vertiente más artística y creativa de su fotografía.
Por todo ello, la producción que hemos podido localizar realizada por la autora, que alcanzó una considerable difusión a través de canales de carácter diverso, es heterogénea en cuanto a género y a estilo, respondiendo a la variedad de facetas profesionales y artísticas que combinó Florentina Prendes. De esta manera, su nombre y su obra se difundieron entre las páginas de la prensa regional pero también de revistas fotográficas de aficionado, en exposiciones de arte local y en numerosos álbumes familiares avilesinos, que todavía hoy conservan fotografías de aquella época con el sello del estudio «Foto Tina».
MAE, Blanca Torralba Gállego, enero 2024, DOI: 10.26754/mae1803_1945
Fotografía titulada Un pasto pobre (1925)
Fotografía titulada Tres fieles amigos (1925)
Fotografía titulada Nueva ondina (1926)
Fotografía titulada Buen ejemplar (1927)
Fotografía titulada Puerta de San Nicolás (1927)
Fotografía titulada Retrato (1927)
Fotografía titulada Tres eran tres (1929)
1926. II Exposición de Arte Avilesino. Avilés, Escuela de Artes y Oficios.
2014. Retratos con animales 1890-1990. Gijón, Muséu del Pueblu d’Asturies.
Retratos con animales, 1890-1990 [catálogo de exposición], Gijón, Muséu del Pueblu d’Asturies, 2014.
RODRÍGUEZ, R., Obdulia García, Avilés, Ayuntamiento de Avilés / Fundación Hidroeléctrica del Cantábrico, 2000, p. 25.
TORRALBA GÁLLEGO, B., “Fotógrafas aficionadas en España: la Revista Kodak (1916-1936)”. En Lomba, C., Alba, E., Castán, A. y M. Illán (eds.), Las mujeres en el sistema artístico, 1804-1939. Zaragoza, Prensas de la Universidad de Zaragoza, 2022, pp. 375-385.
ANTUÑA, M. F., “Mujeres con buen ojo, pulso firme y mucho oficio”, El Comercio (24-IV-2020). FRANCÉS, J., “Los pintores avilesinos”, La Esfera (Madrid, 16-X-1926). HERRERO, C. A., “La II Exposición de arte avilesino”, Región (Oviedo, 25-VIII-1926), p. 3. Región (Oviedo, 08-VIII-1924), p. 1. Región (Oviedo, 04-II-1926), p. 12. Revista Kodak, nº 52, junio 1925, p. 14. Revista Kodak, nº 54, octubre 1925, p. 11. Revista Kodak, nº 57, abril 1926, p. 17. Revista Kodak, nº 58, junio 1926, p. 16. | Revista Kodak, nº 61, diciembre 1926, p. 9. Revista Kodak, nº 63, abril 1927, p. 18. Revista Kodak, nº 65, agosto 1927, p. 8. Revista Kodak, nº 66, octubre 1927, p. 19. Revista Kodak, nº 69, abril-mayo 1928, p 20. Revista Kodak, nº 75, abril-mayo 1929, p. 19. Revista Kodak, nº 76, junio-julio 1929, p. 19. Revista Kodak, nº 77, agosto-septiembre 1929, p. 16. Revista Kodak, nº 79, diciembre 1929 – enero 1930, p. 28. Revista Kodak, nº 82, junio-julio 1930, p. 12. |