Mori, Concha

(Concepción González Martínez)

 

Oviedo, 1883 – Gijón, 16 de agosto de 1972 

 

Pintora asturiana de retratos y bodegones que participa en las Nacionales de 1906 y 1908 que desarrolla posteriormente su trayectoria artística en su tierra natal, Asturias.

 

Fotografía de Concha Mori

 

Concha Mori

 

Nacida el 16 de abril de 1883 en una familia acomodada de Oviedo, la pintora Concepción González Martínez mostró interés por el dibujo desde una edad temprana y desde su adolescencia comienza a adentrarse en los círculos artísticos asturianos. A los 17 años se convirtió en discípula de uno de los grandes amigos de su abuelo: Luis Menéndez Pidal que, al descubrir sus dotes artísticas, decide apadrinarla. Es él quien le aconseja firmar como Concha Mori –nombre por el que se la conoce como artista– y quién le alienta a matricularse en la Escuela Superior de Pintura de Madrid.

Así pues, a principios del siglo XX, la pintora se traslada a Madrid y comienza en la Escuela Superior como alumna de Alejandro Ferrant –director del Museo de Arte Moderno, miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y profesor de acuarela de la Escuela de Artes y Oficios–. Aprovecha su estancia en la capital para conseguir licencia de copista en el Museo del Prado y aprender también así de los grandes maestros, en especial de Velázquez, siguiendo las directrices del estilo de Menéndez Pidal. Acude a su taller como alumna al menos desde 1905 junto al pintor gijonés Manuel Medina. Aquí fue donde preparó su participación a la Exposición de Bellas Artes que se celebraría al año siguiente. En dicha Exposición de 1906 presentó tres cuadros y recibió una Mención Honorífica. Repitió participación en la siguiente edición de 1908.

En Madrid vivió en el número 11 de la calle Churruca y en esta época pintó fundamentalmente tipos gitanos y escenas familiares, como el Retrato de su madre de 1906. En aquel ambiente pudo conocer a otros jóvenes artistas de su misma generación que empezaban a destacar como Ramón de Zubiaurre, Ignacio Zuloaga o Elías Salaverría. Su trabajo suscitó diversos pareceres entre la crítica española: para algunos, como Patricio Adúriz, Concha Mori era considerada una “excelente retratista”, pero otros como Jesús Villa Pastur la consideraba una pintora de segunda fila, expresando con cierto desdén que “de ella se recuerda algún retrato sin gran interés y de escaso relieve artístico”, dudando incluso de su presencia en las Exposiciones Nacionales de 1906 y 1908.

Más tarde, debido a el fallecimiento de su tía Lola, tras repartir las herencias y el traslado de su padre a Mieres para responsabilizarse del mando de una fábrica, Concha deja Madrid y decide volver de nuevo a Asturias.  A la toma de esta decisión seguramente afectó también que su carrera artística no terminara de despegar en la capital española, optando por probar suerte en el ámbito local de su tierra natal. Fue en este momento en el que conocería al que después sería su marido: Rómulo Álvarez, fotógrafo de profesión. Contrajeron matrimonio el 20 de enero de 1919 y posteriormente se trasladaron a Gijón, donde vivirán hasta el fin de sus días. En esta época pintará sobre todo bodegones y escenas con flores, aunque serán sus retratos los que más fama le darán en el territorio asturiano, como los de Xuaquín de Cenera y Elías “Tiruliru”.

En la década de los 40 mueren su padre y su hermano, el cual se había mudado a Méjico. Esta última muerte le afectó mucho y por ello decidió dejar de pintar. Más adelante, dos de las hijas de su hermano fallecido se trasladaron una temporada a Gijón para vivir con el matrimonio y, alentada por sus sobrinas, la artista volvió a pintar. A pesar de ello, limitó la exposición de sus obras al ámbito local asturiano participando en muestras como la Exposición Antológica en el Real Instituto Jovellanos (1948), III Salón de Navidad del Ateneo Jovellanos (1963) o Exposición de Pintores Asturianos de Oscus (1968), todas ellas en Gijón.

Concha Mori fallece el 16 de agosto de 1972 a los 89 años en su domicilio de la calle Calvo Sotelo de Gijón. La mayoría de sus cuadros han permanecido de colección familiar.

MAE, Inés Serrano Arnal, 2023

Una Manola, h. 1906. Óleo sobre lienzo (130 x 100 cm). Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid de 1906.

Una Chula, h. 1906. Óleo sobre lienzo (82 x 53 cm). Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid de 1906.

Estudio, h. 1906. Óleo sobre lienzo (55 x 46 cm). Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid de 1906.

Coquetería (La Gitana), h. 1908. Óleo sobre lienzo (130 x 90 cm). Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid de 1908.

Gran lienzo de tema religioso, 1962. Donado a la Comunidad de Begoña.

1906. Exposición Nacional de Bellas Artes, Madrid (Mención honorífica).

1908. Exposición Nacional de Bellas Artes, Madrid

1948. Exposición Antológica en el Real Instituto Jovellanos, Gijón

1963. III Salón de Navidad del Ateneo Jovellanos, Gijón.

1968. Exposición de Pintores Asturianos de Oscus, Gijón.

1968. VIII Exposición de Arte “Hijos de Mieres”, Mieres (Asturias).

1972. Exposición de Pintores Asturianos en el Salón de Invierno organizado por la Agrupación Gijonesa de Bellas Artes, Gijón.

 

ADÚRIZ, P., “Concha Mori”, Pintores Asturianos, Banco Herrero, Oviedo, 1985.

BURGOS, E., “La hija del administrador”, La Nueva España, 13-01-2015.

FERNÁNDEZ FERNÁNDEZ, Teresa, La mujer y el arte en Asturias durante el siglo XX, Instituto Asturiano de la Mujer KRK, 2004.